El equipo de investigación cree que este hallazgo brindará nuevos y efectivos tratamientos contra varias enfermedades óseas.
Un equipo de investigación de la Universidad Radboud de Nimega (Países Bajos) logró cultivar, mediante una nueva técnica, huesos en laboratorio a partir de células madre de un paciente, lo que abre nuevas posibilidades para el estudio de enfermedades genéticas relacionadas con los huesos y el desarrollo de la medicina personalizada.
Hace años que los expertos realizan investigaciones con organoides, es decir, con células madre que imitan la estructura y la función de órganos tan complejos como los intestinos, los riñones o el cerebro.
La autora del estudio Anat Akiva –bióloga celular en el Centro Médico de la Universidad- señaló: “Presentamos el primer organoide que incluye una visión unificada durante las primeras etapas de la formación del hueso. La investigación concluye que, si se aplica una fuerza mecánica que simule las tensiones que modelan los huesos en el cuerpo humano, es posible hacer que las células precursoras de la médula ósea se transformen en osteoblastos (productores de hueso) y en osteocitos (reguladores del crecimiento), que juntos fabrican todas las proteínas que necesitan para funcionar”.
Según precisó, se logró generar una “matriz extracelular similar al tejido óseo humano que, tras cuatro semanas de cultivo, da lugar a un cilindro de tejido fibroso o hueso inmaduro que se configura por una forma más madura en el cuerpo”.
Cabe aclarar que la estructura ósea está compuesta por 206 huesos, sin contabilizar los pequeños. Son muy difíciles de imitar o recrear, ya que se remodelan durante toda la edad adulta. Es por eso que esta investigación abre nuevas posibilidades para el ensayo de terapias experimentales como la reprogramación genética o la implantación de células madre. Además, serviría para tratamientos más efectivos contra enfermedades óseas como la osteoporosis y la osteogénesis imperfecta.